- Área: 1000 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Laurian Ghinitoiu
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Atravesando el sinuoso río Randselva, el Twist es el primer proyecto de BIG diseñado para Noruega. El edificio se describe como un puente habitable que, rotado en su zona central, crea un recorrido innovador y se manifiesta como una pieza de arte en el interior del Parque de Esculturas Kistefos en Jevnaker. Esta nueva institución de arte contemporáneo de Kistefos, con sus 1.000 m2, sirve también como infraestructura de conexión, permitiendo unir las dos riberas boscosas, funcionando a modo de pieza de completamiento en el recorrido cultural y vinculando entre sí los diversos sectores del mayor parque de esculturas del norte de Europa.
Construido alrededor de un histórico molino de pulpa, el museo Twist se concibe como una viga deformada 90 grados en su centro, en una búsqueda por crear una pieza escultórica desplegada sobre el Randselva. Los visitantes que recorren las obras de diversos artistas internacionales como Anish Kapoor, Olafur Eliasson, Lynda Benglis Yayoi Kusama, Jeppe Hein y Fernando Botero, entre otros, cruzan a través del Twist para completar su recorrido artístico. Como segundo puente y extensión natural del parque, el nuevo museo transforma la experiencia del visitante al tiempo que duplica el espacio de exhibición en el Kistefos.
Una simple torsión en el volumen del edificio permite que el puente se eleve desde las orillas bajas y boscosas del río, vinculando el sector sur con el área de la ladera en el norte. Describiendo un camino continuo en el paisaje, ambos lados del edificio ofician de entrada principal. Desde la entrada sur, los visitantes cruzan un puente de acero revestido en aluminio de 16 metros de largo hasta llegar a un espacio de doble altura donde adquieren una visual ininterrumpida hacia el extremo norte. Este se conecta de manera similar mediante un puente peatonal de 9 metros. La geometría de doble curvatura del museo se materializa mediante paneles rectos de aluminio de 40 cm de ancho dispuestos como si se tratara de una "pila de libros", desplazados ligeramente entre sí en un movimiento de abanico. El mismo principio se utiliza en el interior, materializado mediante listones de abeto de 8 cm de ancho. Estos se encuentran pintados de blanco y cubren tanto el suelo como la pared y el techo, generando un fondo uniforme que permite alojar las exposiciones temporales nacionales e internacionales de Kistefos. Desde cualquier dirección, los visitantes experimentan la galería del Twist como si estuvieran caminando a través del obturador de una cámara.
En el extremo norte, un paño de vidrio completo de piso a techo ofrece vistas panorámicas al molino de pulpa y las zonas más estrechas del río. Luego, esta misma pieza se curva en su parte superior para formar una claraboya mediante una franja de vidrio de 25 cm de ancho. Debido a la curvatura de las ventanas de cristal, la luz natural que ingresa en el museo varía según la zona, creando tres galerías con cualidades lumínicas muy distintas: una amplia galería iluminada naturalmente con vistas panorámicas en el lado norte; una galería alta y oscura con iluminación artificial en el lado sur; y, en el medio, un espacio escultórico con una estrecha franja de luz rotada en la cubierta. La capacidad de compartimentar, dividir o fusionar los espacios de la galería brinda la flexibilidad necesaria para adaptar el edificio a la variada programación artística de Kistefos. En el terraplén norte del río, una escalera de cristal permite el descenso hasta el nivel inferior del museo. Allí, la parte del volumen principal materializada en aluminio se convierte en el techo del sótano y el área de los baños. Otro cerramiento constituido enteramente en cristal potencia la conexión de los visitantes con el río, mejorando aún más la experiencia y el sentimiento de estar inmerso en los magníficos bosques de las afueras de Oslo.